Como ya sabes, los pensamientos son involuntarios, aparecen de repente y no puedes hacer que desaparezcan así como así. Ahora bien, lo que sí se puede es cambiar la manera de ver ese pensamiento. Normalmente, no les encontramos funcionalidad ni sentido porque molestan. Estar todo el día pensando es agotador, y lo peor, es que a veces ni te das cuenta de que lo estás haciendo. Vives con el piloto automático activado. ¿Sabías que la práctica de Mindfulness te ayuda a identificar tus pensamientos? El poder identificarlos, va a ser el primer paso para que puedas soltarlos y dejarlos ir.
¿A qué llamamos Mindfulness?
Este término hace referencia a lo que se considera atención o conciencia plena, consistente en dirigir intencionadamente toda la atención a lo que pensamos, sentimos, a las emociones, a las sensaciones… sin juzgar si son adecuadas o no, simplemente siendo conscientes de que están sucediendo.
Por ejemplo: cuando tienes mucha sed, ¿sueles beber el agua rápido? Yo sí, e imagino que muchas de las que leéis esto, también. ¿Alguna vez os habéis parado a observar qué recorrido sigue el agua cuando empezáis a beber? ¿Y la temperatura que tiene? ¿O cómo es tu respiración mientras bebes agua? ¿Te habías fijado que no respiras si bebes seguido?
Todas estas preguntas que parecen muy tontas, son las que normalmente no te haces en tu día a día, viviendo entonces en un piloto automático constante. El poder parar un minuto de tu día a ser consciente de lo que estás haciendo, podrá ayudarte mucho a dejar de pensar y focalizarte en actividades del presente.
¿Cómo empezar la práctica de Mindfulness?
Para lograr esto, lo primero es ser conscientes de que el pensamiento se está presente, es decir, darnos cuenta de lo que estamos pensando. Como decía más arriba, normalmente ni siquiera nos damos cuenta de que estamos pensando.
Haz una pequeña pausa en tu día, y párate a observar qué estás pensando. ¿Cuántos pensamientos puedes contar? ¿Es uno sobre un solo tema que te está preocupando? ¿O son pensamientos encadenados en los que vas saltando de uno a otro?
¿Qué beneficios tiene Mindfulness?
- Es una manera de autoconocimiento, pudiendo saber qué está pasando en tu interior a través de las emociones, sensaciones corporales y pensamientos.
- Si eres consciente de lo que está pasando por tu cabeza y por tu cuerpo, puedes saber qué necesitas y dártelo. Es por tanto una forma de autocuidado.
- Ayuda a controlar la ansiedad y el estrés.
- Mejora la concentración.
- Aumenta la plasticidad neuronal, que es la capacidad del cerebro para crear nuevas conexiones neuronales.
Durante su práctica, no hay algo que esté bien o mal, ya que es una experiencia personal que cada uno vive de manera individual. Cuanto más practicas, más consciente eres y, por tanto, más capaz de redirigir tu atención, así como de regularte emocionalmente. Este despertar de conciencia, te permitirá saber qué sientes y experimentas en tu interior. Recuerda que el objetivo no es cuestionar el por qué están presentes algunas de las cosas que aparecen en ti, simplemente, vas a observar que están. Es a partir de esa conciencia, cuando puedes empezar a aceptar(te) y convivir con tus pensamientos y estados emocionales internos.
El poder parar en esta sociedad tan acelerada, es un descanso para tu sistema nervioso, para tu cerebro y tu cuerpo. Con Mindfulness aprendes a tomar conciencia de tus emociones, sensaciones y sentimientos, en ti misma y en los demás con aceptación.
Ser consciente significa abandonar los juicios durante un tiempo, dejar de lado nuestros objetivos inmediatos para el futuro, y tomar el momento presente como es y no como nos gustaría que fuera.
Mark WilliamsEste
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